La tradición sostiene que Hungría fue
fundada por siete tribus magiares (húngaras), que emigraron en el siglo VIII desde
la región de los Montes Urales cerca del límite de Europa y Asia, hasta el
territorio actual. Estas fueron guiadas por siete jefes: Álmos, Előd, Ond,
Kond, Tas, Huba y Töhötöm. Un par de décadas después de haber llegado a las
tierras del Danubio, Árpád (el hijo mayor de Álmos) se convirtió en príncipe y
líder absoluto de las tribus, que hicieron un pacto de sangre para simbolizar
la unión. Así comenzó la historia de la nación húngara y la dinastía de los
Árpád.
El tataranieto de Árpád, fue Esteban
I, que reinó a principios del siglo XI, sabía que si su nación quería sobrevivir,
debía ser reconocida como reino cristiano y estar bajo la tutela del Papa; y
así, comenzó su lucha contra el paganismo tras haber sido coronado Rey de
Hungría en el año 1000.
Una vez desaparecida la familia real húngara
de la Casa de Árpad en 1301, el príncipe napolitano Carlos Roberto de Anjou,
reivindicó el trono como único descendiente por vía materna de los reyes
húngaros. Comenzó entonces la Edad de Oro del reino, Hungría pasó a ser el
mayor proveedor de oro y plata en Europa de la época, y a dominar comercial y
militarmente su entorno. Esta época dorada finalizó con la derrota húngara en
la Batalla de Mohács en 1526 y la ocupación de Buda (hoy parte de Budapest) por
parte de los otomanos.
A finales del siglo XVII, Hungría y
Transilvania pasaron a formar parte del Imperio de los Habsburgo (Imperio
austríaco a partir de 1806), ocasionando varios conflictos entre la nobleza
magiar, poderosa y de espíritu independiente, y las tendencias centralistas de
Viena.
Tras la derrota austríaca de 1866 contra
Prusia en la Guerra de las Siete Semanas, Hungría se convertiría finalmente, en
1867, en una parte autónoma del Imperio austrohúngaro.
En 1902, una comitiva húngara
encabezada por Ferenc Deák fue enviada a Viena, donde se firmó un tratado, que
otorgaba a Hungría instituciones políticas propias, gobierno y ejército
propios, y además el el parlamento tendría su sede en Budapest.
A diferencia de la parte austríaca,
Hungría se mantuvo esencialmente rural y agraria bajo el dominio de una
numerosa y poderosa nobleza, que controlaba gran parte de los recursos del
Estado.
Sin embargo cuando el Imperio
austriaco fue derrotado en la Primera Guerra Mundial, Hungría declaró su
independencia el 1 de octubre de 1918. Con el Tratado de Trianon, firmado en
1920 por Miklós Horthy, Hungría firmó la paz con las potencias vencedoras y
perdió gran parte de su territorio, como Eslovaquia, Transilvania y Croacia.
En los años 1930 tras cierta presión,
el regente húngaro Miklós Horthy, estableció una alianza con la Alemania nazi,
con la promesa de revisar el Tratado de Trianon. Hungría fue recompensada por
Alemania con territorios pertenecientes a Checoslovaquia, Yugoslavia y Rumanía.
Con el estallido de la Segunda Guerra
Mundial, Hungría se unió al Eje, pero en 1944 las relaciones entre el Reino de
Hungría y Alemania estaban muy tensas; la suspensión por parte de Miklós Horthy de las
deportaciones masivas de judíos húngaros a Alemania, hizo que los nazis
tuvieran que presionarlo para que finalmente accediera. Sin embargo, desde
entonces, Hitler mantuvo dudas acerca de su lealtad.
En marzo de 1944, Hungría fue ocupada
por los nazis sin ofrecer resistencia, ante los planes del gobierno para
cambiar de bando; y Horthy fue forzado a nombrar un nuevo gobierno más
favorable a los intereses alemanes. El elegido por los alemanes fue el
colaboracionista pro nazi húngaro, Ferenc Szálasi, que llegó al poder en
octubre, era el líder del Partido de la Cruz Flechada, de carácter fascista,
pro-alemán y antisemita (semejante al Partido Nazi germano). Ferenc Szálasi gobernó
Hungría durante un corto periodo, pero se caracterizó por el regreso a la
persecución de la población judía, se estableció un gueto, y las deportaciones
a campos de concentración y asesinatos eran continuas.
Budapest era una ciudad importante en
Europa centro y además era la capital del último aliado que quedaba de la
Alemania nazi. En octubre de 1944 comenzó el asalto de Budapest, por imposición
de Stalin; la gran mayoría de edificios fueron destruidos o dañados, además de
cinco puentes destruidos, murieron cerca de 40.000 soldados y 38.000
civiles, la mayoría de ellos de hambre o enfermedades. El Sito de Budapest,
duró hasta febrero de 1945 cuando la ciudad fue tomada por el Ejército Rojo, y está
considerada como una de las batallas más sangrientas, junto con Stalingrado y Berlín.
Al finalizar la guerra, en 1946,
Szálasi y otros líderes del Partido de la Cruz Flechada, fueron juzgados en
sesiones públicas por un tribunal popular, y condenados a muerte por crímenes
de guerra y alta traición; Szálasi fue ahorcado.
Tras la caída de Hitler, el país fue
ocupado por tropas soviéticas, y pese a que hubo un pequeño período liberal, en
1947 se instauró un gobierno comunista, liderado por el Partido de los
Trabajadores Húngaros, encabezado por Mátyás Rákosi.
Cuando murió Stalin en 1953, se inició
(como en la Unión Soviética y toda Europa del Este), el proceso de desestanilización,
en que se aprobó un nuevo programa económico y se concedió amnistía a varios
prisioneros políticos.
El 14 de mayo de 1955 se firmó el
Pacto de Varsovia, que era un tratado de ayuda mutua, tanto económica como
militar, firmado por los países del Bloque del este, bajo el liderazgo de la
Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), su objetivo expreso era
contrarrestar la amenaza de la Organización del Tratado del Atlántico Norte
(OTAN).
En 1956 se produjo un movimiento
espontáneo conocido como Revolución húngara, que comenzó con una protesta
estudiantil, que poco a poco atrajo a más personas y se expandió por todo el país.
Una revuelta contra el gobierno de la República Popular de Hungría y sus políticas
impuestas desde la Unión Soviética, el pueblo húngaro quería libertad para
elegir su propio sistema político. El gobierno fue derrocado, y el nuevo
gobierno encabezado por Imre Nagy declaró su intención de retirarse del Pacto
de Varsovia y restablecer elecciones libres; pero fue respondida con una
intervención militar por parte de la Unión Soviética. Dos años después Imre
Nagy, fue condenado a muerte en un juicio secreto.
Posteriormente en 1989 Hungría fue uno
de los primeros países en mostrar iniciativa de romper el Telón de Acero. Dio
el primer paso el 2 de mayo, levantando la alambrada en algunos sitios y dando
orden a los guardias de no disparar si alguien intentaba cruzar la frontera. El
mes siguiente, los entonces ministros de Exteriores de Hungría y Austria, Gyula
Horm y Alois Mock respectivamente, cortaron en un acto simbólico la alambrada
que les separaba. El 19 de agosto se
celebró un evento que fue conocido como “Picnic Paneuropeo”, cerca de la ciudad
húngara de Sopron, se cortaron las alambradas que separaban su frontera con
Austria, ese día 600 personas la cruzaron; una decisión que iba a
cambiar el curso de la historia. Y que fue posible entre otras cosas, porque el
guardia que estaba en aquel momento al mando de la frontera, el teniente
coronel Bella Arpad, optó por dejar pasar a la multitud de personas
desobedeciendo a sus superiores (enfrentándose a un juicio militar y cinco años
de prisión); tomó la decisión porque consideró que disparar a civiles hubiera
sido una vergüenza para Hungría.
Conocedores de la situación, los
alemanes del Este comenzaron a atravesar Checoslovaquia para pasar a Hungría y
finalmente a Austria, para alcanzar la libertad. El 10 de septiembre, Hungría
abrió su frontera con Austria. Y finalmente el 9 de noviembre con la caída del
muro de Berlín, supuso el fin del comunismo en el Bloque del Este.
Fue el país que mejor afrontó la caída
de la Unión Soviética en Europa Central, ya que había ido acercándose
paulatinamente al sistema de libre mercado durante los últimos años del régimen
socialista.
Hungría forma parte de la Unión
Europea desde mayo de 2004.
El 12 de septiembre de 2018, el
Parlamento Europeo recomendó la aplicación a Hungría del artículo 7 del Tratado
de la Unión Europea, por negarse a acoger refugiados y no respetar las
políticas de la UE. La aplicación del
artículo podría suponer diferentes medidas, entre ellas la posibilidad de que
el país perdiera su voto en el Consejo de la Unión Europea; siempre y cuando se
produzca el voto unánime de todos los miembros de la UE.
Alrededor del 60-70 % de los húngaros
son católicos, y un 20-25 % protestante.
BUDAPEST
Se constituyó el 17 de noviembre de
1873 al unificarse las ciudades de Buda y Óbula en la orilla oeste del Danubio
y Pest, en la orilla este.
Su línea amarilla del metro construida
en 1896, es la segunda más antigua del mundo (sólo superada por Londres) y es
Patrimonio de la Humanidad.
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Foto: wikipedia |
Personas importantes y famosas:
Harry Houdini
Nacido en Budapest en 1874, de nombre
verdadero Erik Weisz (cambiado después a Erich Weiss al emigrar a Estados
Unidos), fue un ilusionista y escapista nacionalizado estadounidense.
Cuando tenía 4 años su familia de
origen judío, se trasladó a Estados Unidos.
Desde pequeño siempre se había
interesado por la magia, y cuando siendo joven leyó un libro de Jean Eugène
Robert-Houdin, un ilusionista francés, que está considerado como el padre de la
magia moderna, inmediatamente lo convirtió en su ídolo (además de utilizar el
apellido del mago como su nombre artístico); y finalmente se dedicó a la magia.
Aunque era un profesional en todas las
ramas de la magia, era conocido por sus escapismos imposibles, gracias a una
gran resistencia física adquirida por una fuerte preparación en correr y
natación. Demostró una gran habilidad para liberarse del interior de cajas
fuertes arrojadas al mar, de camisas de fuerza colgado boca debajo de rascacielos,
de todo tipo de esposas, de cuerdas, de baúles cerrados con candados y cadenas
de cualquier tipo.
Murió en Detroit a los 52 años de
peritonitis.
László József Bíró
Nacido en Budapest en 1899, fue un
inventor y periodista húngaro nacionalizado argentino, autor de más de 30
inventos, entre ellos una máquina para lavar ropa y un sistema de cambio
automático en los automóviles; pero lo que le dio fama internacional fue el
bolígrafo.
Alrededor de 1938, cansado de los
problemas que entrañaba escribir a pluma (era zurdo), comenzó a pensar en
alternativas o mejoras; pero no lo consiguió.
En mayo de 1940, al comenzar la
Segunda Guerra Mundial, él y su hermano emigraron hacia Argentina junto con
Juan Jorge Meyne, su socio y amigo de origen judío, que lo ayudó a escapar de
la persecución nazi. Entonces cambio su nombre a, Ladislao José Biro.
A su llegada formaron la compañía Biro
Meyne Biro y mejoró su invento, patentándolo en junio de 1943 en Buenos Aires;
lanzaron el producto al mercado bajo el nombre comercial de Birome (acrónimo
con las sílabas iniciales de Biro y Meyne).
Murió en Argentina a los 89 años de
edad.
El día de su nacimiento, el 29 de
septiembre, en Argentina se conmemora el Día del Inventor.
Endre Ernő Friedmann
Nacido en Budapest en 1913, fue
corresponsal gráfico de guerra y fotoperiodista durante el siglo XX, que
trabajo bajo el nombre de Robert Capa; dicho seudónimo lo compartió con su
compañera Gerda Taro (seudónimo de Gerta Pohoryll). Dejó un legado de 70.000
negativos.
A los 18 años abandono Hungría que ya
estaba bajo gobierno fascista y viajó a París, allí comenzó a trabajar para el
fotógrafo David Seymour; y conoció a la fotógrafa alemana Gerda Taro, que acabó
siendo su pareja sentimental y profesional.
Al compartir seudónimo es difícil
saber de quién es cada foto.
Al estallar la Guerra Civil Española
en julio de 1936, la joven pareja se trasladó a España para cubrirla; implicados en
la lucha antifascista y con la causa de la República, desde
ese lado, en los principales frentes de combate, desde los inicios en el frente
de Madrid, hasta la retirada final en Cataluña.
Gerda Taro perdió la vida en un
accidente durante el repliegue del ejército republicano, en la madrugada del 26
de julio de 1937, con sólo 26 años. Su cuerpo fue trasladado a París, donde
recibió todos los honores como una heroína republicana; está enterrada en el
cementerio de Père-Lachaise de París.
Siempre en primera línea, es
mundialmente famosa su fotografía “Muerte de un miliciano”, tomada en Espejo,
en el frente de Córdoba, el 5 de septiembre de 1936. Aunque su autenticidad ha
sido puesta en cuestión por diversos expertos.
Durante la Segunda Guerra Mundial,
estuvo presente en los principales escenarios bélicos. Estuvo en el desembarco
aliado en Normandía el 6 de junio de 1944, el famoso día D, son clásicas sus
fotografías tomadas, junto a los soldados que desembarcaban en la playa Omaha;
de las 134 fotos que tomó solo once sobrevivieron al revelado, las cuales se
conocen como "Las magníficas once".
En 1947 en París, junto con David
Seymour, Henri Cartier-Bresson, George Rodger y William Vandivert, fundó la
organización Magnum Photos, la primera agencia de cooperación para fotógrafos
independientes de todo el mundo, por primera vez eran los propios fotógrafos
los que tenían sus derechos; hasta entonces la empresa que compraba las
fotografías las podía usar siempre que deseara sin pagar más a los fotógrafos.
En 1954, el fotógrafo de Life, que
cubría desde hacía varios meses la guerra de Indochina, tuvo que regresar a
Estados Unidos y el editor de la revista convenció a Robert Capa para que le
reemplazara en el frente. En la madrugada del 25 de mayo, mientras acompañaba en
un jeep por una peligrosa zona boscosa, a una expedición del ejército francés
en Vietnam, decidió bajarse y adelantarse a pie para fotografiar el avance.
Entonces el pelotón escuchó una explosión, había pisado una mina que le voló la
pierna y le produjo una grave herida en el pecho; murió camino al hospital a
los 40 años.
Popularizo una frase “si tu foto no es
lo suficientemente buena, es porque no estabas suficientemente cerca”.
Ernő Rubik
Nacido en Budapest en 1944, es un
escultor, arquitecto y diseñador, al que conocemos por ser el autor del mundialmente
famoso cubo de Rubik.
Este cubo rompecabezas mecánico fue
inventado en 1974, originalmente bautizado como cubo Mágico; a finales de 1977
se distribuyó en jugueterías de Budapest. Pero fue en mayo de 1980, cuando se
comercializó a nivel mundial, y se le rebautizó como cubo de Rubik. Se
ha dicho de él, que es el juguete mejor vendido del mundo, con alrededor de 350
millones de cubos de Rubik vendidos hasta 2009.
Existe un español que fue un persona importante en la
historia de Hungría, concretamente en la de Budapest durante la Segunda Guerra Mundial.
Ángel Sanz Briz
Llamado el “Ángel de Budapest”, era un
español nacido en Zaragoza en 1910, que fue un diplomático destinado a Hungría
como embajador durante la Segunda Guerra Mundial.
En 1944 actuando por cuenta propia, salvó
la vida de unos 5.000 judíos húngaros durante el Holocausto, proporcionando
pasaportes españoles, en un principio a judíos que alegaban origen sefardí; y
posteriormente a cualquier judío perseguido, haciéndolos pasar por sefardíes.
Lo logró usando su influencia y
contactos, así como su dinero para sobornos, y llegó a alquilar once edificios
con los fondos de la Embajada, que se consideraban territorio español.
Ante la inminente caída de Budapest en
manos del Ejército Rojo, el Gobierno le ordenó abandonar la embajada y se
trasladó a Suiza en noviembre de 1944.
Giorgio Perlasca, comerciante italiano
que había estado ayudando al embajador en sus tareas de protección de los
judíos, continuó su labor utilizando documentos de identidad españoles
falsificados por él mismo, en los que declaraba ser el embajador español en
funciones ante Hungría.
En diciembre de 1944 Perlasca hizo su
ronda por las casas protegidas y en una de ellas vio que los cruciflechados
habían sacado a todos sus habitantes. Los
cruciflechados habían sido informados desde la frontera que el embajador había
abandonado Hungría, lo que suponía que ya no había embajada española, y por
tanto ya no había motivo para mantener la protección de los judíos españoles.
Perlasca dijo que era una equivocación, que estaban fallando las líneas de
comunicación, les dijo que el embajador se había ido a España por un breve
período de tiempo, pero que mientras tanto, él era quien dirigía la embajada en
funciones. Perlasca consiguió que los judíos españoles siguieran a salvo hasta
el 16 de enero de 1945, cuando los soviéticos entraron en Budapest.
Ángel Sanz murió en Roma a los 70 años
de edad, cuando era embajador de la Santa Sede.
Por estos hechos fue reconocido por
Israel, como Justo entre las Naciones en 1991, y se inscribió su hombre en el
memorial del Holocausto de Israel.
En 1994 el gobierno de Hungría, le
concedió a título póstumo la Cruz de la Orden del Mérito de la República
Húngara. En la Gran Sinagoga de Budapest, hay una placa que lleva su nombre.
Posteriores descubrimientos en la
correspondencia diplomática, revelaron que informó en 1944 al Gobierno de la
existencia del Holocausto.
En 2011 la película El Ángel de
Budapest fue estrenada en Televisión Española, está basada en el libro de Diego
Carcedo “Un español frente al Holocausto”.
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Foto: wikipedia (Rob Meiremet) |